Se realiza por las noches a oscuras con una duración de 4 horas aproximadamente, los pacientes o tomadores se sientan formando un circulo cerca al shamán (curandero) quien comienza los 'Icaros', que consiste en silbidos suaves, palabras inentelegibles y bocanadas de humo de tabaco puro y fuerte, fumado en pipa de madera con boquilla de hueso de mono, esto es realizado con la finalidad de atraer a los espíritus de las plantas para ayudar y dar el efecto necesario que se requiere en la toma.

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Después de los Icaros, el shamán prosigue con las oraciones pidiendo protección al dios todo poderoso, para no ser dañados por espíritus malos, para luego iniciar la distribución de la dosis a cada paciente e ingerir la misma, pueden fumar para ayudar a la mareación.

 

 

El rito de la purga del Ayahuasca como su nombre lo sugiere es de limpieza y purificación, ingerido el Ayahuasca el Shamán cantará y silbará llamando a la mareación para que en 30 minutos más o menos comenzar a sentir los efectos de mareación y vómitos de limpieza, el Shamán es el que controla con icaros y cánticos que tienden a buscar el efecto de modificación de la conciencia, guía y controla los estados que se producen.

 

 

Físicas: frío y/o mareo, percepción de colores, imágenes, plenitud, vómitos y en algunos casos diarrea todo ello ayuda a la limpieza del organismo. Psíquicas: percepción cruzada, vienen recuerdos, necesidad de reconciliación consigo mismo y con los demás. Visones personales, de los demás y animales de la selva. Espiritualidad: sesión de comunión cósmica, sentimiento de respeto a la vida y a lo sagrado.

 

Se recomienda 1 o 2 veces al día.